Para una empresa en cualquier fase, el financiamiento juega un rol clave para ayudarla con su crecimiento. Al pensar en su cadena de suministro, este puede ser también un gran aliado para ser más competitiva y mejorar su acceso a capital de trabajo.
En ese sentido, el factoraje inverso se convierte en una gran alternativa y puede ser una de tus principales fuentes de financiamiento. Pero, ¿en qué consiste y qué implica?
¿Qué es el factoraje financiero?
El factoraje financiero es una transacción comercial que permite a una empresa acceder a financiamiento, incrementar sus ventas y crecer sin asumir grandes riesgos.
En este esquema un factor (es decir la institución que provee el financiamiento) adelanta el pago de facturas que un comprador va a pagar a crédito.
Existen diferentes tipos de factoraje, ya sea con recursos y sin recurso, así como para clientes o proveedores. Puedes leer más sobre el factoraje en este enlace.
¿Qué es el factoraje inverso?
Con el modelo básico de factoraje financiero, el factoraje inverso es un esquema de financiamiento de cuentas por pagar enfocado en mejorar y eficientar las cadenas de suministro de las empresas.
El factoraje inverso es el modelo donde un comprador paga de modo anticipado a su proveedor mediante una empresa de factoraje.
En este caso, el cliente de factoraje es el comprador, quien realiza sus adquisiciones y se dirige con el factor para encontrar liquidez ante el vendedor.
El proveedor recibe el pago de su cuenta por cobrar por parte del factor, y finalmente, el comprador pagará el vencimiento de la factura a la empresa de factoraje en el plazo establecido.
Tomando como ejemplo los servicios que ofrecen empresas como Drip, el factor absorbe tus cuentas por pagar y te otorga un plazo adicional para que completes el pago.
Drip se encarga de pagar a tus proveedores en la fecha establecida.
En otras palabras, es una forma de financiamiento para comprar ahora y pagar tus importaciones después.
Beneficios del factoraje inverso y ventajas que ofrece a tu cadena de suministro
El principal beneficio del factoraje inverso es la optimización de flujo de efectivo, donde una empresa importadora puede retrasar el pago de sus facturas. Estas las pagará a la institución financiera en un periodo de entre 30 y 120 días.
Con esto podrá mejorar la capacidad de negociación con nuevos proveedores y aumentar la confianza con los actuales.
Además, las empresas importadoras no verán obstáculos para mantener sus niveles de capital de trabajo en las mejores condiciones.
Este método de financiamiento está diseñado para ayudar a las empresas a mejorar sus cadenas de suministro y tener un flujo de efectivo más sano. En resumen, las ventajas que puede ofrecerte son:
- Ten acceso oportuno a tu efectivo utilizando facturas o inventario.
- Genera una cadena de suministro más eficiente.
- Mejora tu flujo de efectivo (liquidez).
- Utiliza financiamiento sin contraer ningún tipo de deuda.
- Financiate de forma económica usando tus cuentas por pagar.
- Mantén o extiende los periodo de pago a proveedores.